El capitán de Águilas Doradas, Guillermo Celis, opinó de la polémica jugada sobre el final del partido que su equipo le ganó 4-3 a Junior y reconoció que el árbitro Jhon Ospina pudo haber sancionado pena máxima a favor del conjunto barranquillero porque evidentemente le pelota pegó en su mano.

“El balón me pegó en la mano, pero antes de pegarme mi compañero intenta rechazar. Son jugadas de interpretación, como pudo pitar el penalti él tomó la decisión de no hacerlo. Son jugadas del futbol, jugadas rápidas y, en este caso, gracias a Dios nosotros logramos quedarnos con la victoria”, dijo el mediocampista sincelejano en diálogo con el Vbar Caracol.

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Curiosamente, la acción no fue revisada en el VAR por el árbitro Ospina pese al reclamo de los jugadores y el técnico del Junior, César Farías, quien catalogó la de Celis como una “manaza”, más que la sancionada a Víctor Cantillo, antes de que este rematara y convirtiera en el pórtico de Águilas Doradas.

“Fácilmente (el árbitro) pudo pitar el penalti porque el balón me pega en la mano, pero no somos nosotros los jugadores los encargados de tomar esas decisiones. El árbitro, a su manera, interpreta que primero un compañero intenta rechazar, desvía la pelota y me pega en la mano. No puedo decir que no porque es la verdad”, dijo Celis, quien también rechazó la pelota que pegó en la mano de Cantillo, en el gol invalidado a Junior en el primer tiempo.